Viajar seguro: consejos de prevención

Un problema de salud puede complicarnos el viaje, por lo que es importante adoptar medidas preventivas básicas para evitar contraer enfermedades.

1. Riesgos relacionados con alimentos y bebidas.

Debemos seleccionar con cuidado todo lo que vamos a comer o a beber, ya que los alimentos y las bebidas en mal estado o contaminadas son la causa más frecuente de enfermedad durante el viaje.

El Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, facilita una serie de instrucciones que el viajero no debe olvidar:

- Lavarse las manos con frecuencia, sobre todo antes y después de comer, manipular alimentos, ir al baño, etc

- Beber agua embotellada o debidamente tratada. Las bebidas calientes y refrescos embotellados son más seguros.

- No tomar hielo que no haya sido preparado con agua segura.

- Consumir solo leche envasada y derivados lácteos debidamente higienizados.

- Evitar consumir pescado y marisco crudo ya que existen países en los que algunas especies pueden ser peligrosas incluso cuando estén cocinadas.

- Las comidas deben estar suficientemente cocinadas y servirse calientes.

- Debe tenerse cuidado con las salsas y preparados que contenga huevos crudos.

- La fruta debe ser pelada personalmente y las verduras no deben comerse crudas. Las ensaladas pueden ser peligrosas.

- Debe evitarse la comida de los vendedores callejeros.

Incluso teniendo mucho cuidado con lo que comes y bebes en estos países, en ocasiones es inevitable enfermar, por ello es muy recomendable llevar un seguro de viaje. Yo tuve la mala suerte de ponerme enferma en Phnom Penh debido a una infección de estomago por comer pollo mal cocinado o en mal estado. Estuve un día ingresada con sueros y una semana bastante débil y desganada a base de té negro y arroz blanco.

Tampoco debemos olvidar llevar siempre con nosotros un botiquín de viaje que incluya:

- Analgésicos/antitérmicos: paracetamol e ibuprofeno.

- Antialérgicos/Antihistamínicos: antihistamínicos orales o un corticoide local para alergias y las picaduras.

- Antibióticos: sólo se utilizan en caso de no poder acudir al médico y ante la presencia de fiebre alta.

- Antidiarreicos: sales de rehidratación oral y spiraxin o almax.

- Protectores solares:  Cremas para cara y cuerpo con filtro solar alto o pantalla total.

- Materiales de cura: gasas estériles, esparadrapo, tiritas, solución antiséptica, tijeras, etc.

- Desinfectantes de agua no potable y sales de rehidratación oral.

- Repelentes de mosquitos y otros insectos: Llevar repelente que contenga estas siglas: DEET. Goibi tropical va muy bien.

2. Riesgos relacionados con el entorno.

El excesivo calor y la humedad pueden provocarnos agotamiento, deshidratación o un golpe de calor, por eso debemos beber constantemente.

Tenemos que tener especial cuidado con las picaduras de insectos, ya que son muy típicas en esta zona. Para protegernos contra las picaduras debemos vestirnos con ropas de manga larga y pantalón largo al anochecer y al amanecer. Además es preferible evitar llevar colores oscuros y perfumes intensos ya que estos pueden atraer a los mosquitos. En las partes del cuerpo que no estén protegidas por la ropa se deben usar repelentes de insectos como acabamos de mencionar. Por último las habitaciones han de estar debidamente protegidas con telas metálicas en puertas y ventanas. Es aconsejable el uso de mosquiteras alrededor de las camas fijándolas bajo el colchón.

Por último, atención a los baños en ríos y lagos de agua dulce, ya que estos pueden ser origen de enfermedades, entre ellas las parasitarias.